Tenía 85 años. Había sido actor toda la vida. Cientos de papeles, cientos de rostros, cientos de vidas, cien mil maneras de asomarse al mundo. Había cogido de cada plato, se había servido de cada cuerpo, había rechazado lo que no le gustaba y en ocasiones, simplemente, se había limitado a observar.
Ya era mayor para algunas cosas, pensaba él. No tanto para otras. Tenía temblorosas las manos, pero la imaginación y el pasado seguían funcionando. Nadie podía arrebatarle todo aquello. Podía cerrar los ojos y transportarse a otro lugar. Vivir lo que había vivido sin olvidarse de que todavía le quedaba mucho por vivir.
Y seguía siendo actor. Pero ya no era como antes. Antes sus papeles estaban llenos de vida, de historias inconclusas y libros de hojas en blanco. Pasión, velocidad, incertidumbre. Amor. Sus personajes eran nubes cuya lluvia nadie podía predecir. Sin rumbo, sin dirección, a pecho descubierto.
Ahora sus papeles eran historias sin puntos suspensivos. Hombres que filosofaban sobre el paso del tiempo y la proximidad de la muerte. Personas que ofrecían consejos a piedras rodantes sin rumbo. Miraban al pasado sin hacer caso al futuro, creyendo que la importancia residía en el tamaño del espacio. Todos estaban ya muertos y no tenían nada más que decir.
Estaba harto de interpretar a esos tipos. Sabía que la marea todavía podía hender algunas rocas. Sabía que estaba lleno de vida. Él todavía estaba en la tierra. No le podían decir que no lo estaba porque era mentira. No sabía dar consejos. Se le daba bien escribir y lo hacía todos los días. Porque una historia defrauda si no tiene un buen final.
No quería jugar a la azarosa monotonía de las cartas. Quería leer y escribir. Chupar del tubo de la vida hasta que sonara como una cafetera. Nadie le podía impedir todo aquello. Todavía le quedaban muchas cosas por decir. Seguiría viviendo a pensión completa aunque perdiera aquel trabajo. Nadie vive más en los relatos breves. Nadie escribe más. Simplemente todos dejamos de hacerlo.
lunes, 16 de febrero de 2009
Nadie vive más
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentarios:
Tal y como están las cosas, mejor ir haciéndose un buen plan de pensiones...
Publicar un comentario